¿Cuándo se considera un accidente in itinere?
Se considera que un accidente es “in itinere” cuando, de no haber tenido que ir el trabajador a su puesto de trabajo desde su casa o a la inversa, no se habría producido la lesión.
Así, el origen y destino del desplazamiento debe ser el puesto de trabajo y el domicilio (o viceversa), sin interrupciones por motivos personales o desviaciones arbitrarias o injustificadas. La finalidad última del desplazamiento tiene que ser “laboral”.
El concepto de domicilio es amplio, y también incluye lugares de residencia, estancia o comida distintos de la residencia principal del trabajador. Se acepta como accidente de trabajo “in itinere” el acaecido en circunstancias directamente relacionadas con el trabajo como, por ejemplo, el sufrido al ir a cobrar el salario o por actos sociales que tienen alguna conexión con el trabajo (ir o regresar de una comida de trabajo).
Si tiene preguntas sobre los accidentes durante la jornada laboral o cualquier otro tema, no dude en contactarnos, somos su gestoría laboral en Granollers.
¿Cuándo debe tener lugar el accidente in itinere?
El accidente debe tener lugar en un momento próximo al inicio o final de la jornada laboral. Es decir, debe ocurrir en un tiempo prudencial, inmediato o razonablemente próximo a las horas de inicio o finalización del trabajo, de manera que el recorrido no puede verse alterado por desviaciones o modificaciones temporales que no sean normales y que obedezcan a intereses particulares.
En caso de retraso, si éste está justificado, se considera un accidente de trabajo. Si no lo está, se entenderá roto el nexo causal y por tanto el accidente no podrá calificarse de laboral.
El trayecto en el que tiene lugar el accidente debe ser el habitual. Es decir, el accidente ha de producirse en el camino habitual (el que normalmente se recorre, aunque no sea el más corto).
Es “in itinere” el accidente del empleado que antes de ir al trabajo ha ido a casa de sus padres a dejar a su hijo, o el del empleado que, al salir del trabajo, se desvía para recoger a su hijo al colegio y volver juntos al domicilio familiar. Sin embargo, no se considera “in itinere” el accidente que se sufre en caso de desvío de la ruta para reunirse con unos amigos, o para recoger el coche al taller.
No se rompe el nexo causal por la mera infracción de normas del código de circulación, pero sí cuando concurre imprudencia temeraria o la conducción de vehículos en estado de embriaguez o drogas.
Requisitos del accidente in itinere
Por lo tanto, una vez visto que es un accidente in itinere i en qué circunstancias se da, vamos a ver un resumen de los requisitos para ser válido:
- Relación laboral: El accidente in itinere debe ocurrir en el contexto de una relación laboral existente. Es decir, el trabajador debe estar en camino hacia o desde su lugar de trabajo.
- Trayecto directo: El accidente debe ocurrir en el trayecto directo entre el domicilio del trabajador y el lugar de trabajo, sin desvíos injustificados. Se espera que el trabajador siga la ruta más directa y razonable para llegar a su destino.
- Horario laboral: El accidente in itinere generalmente debe ocurrir dentro de los límites de tiempo razonables en relación con el horario laboral. Por lo tanto, si el trabajador se desvía significativamente de su horario normal, puede no cumplir con este requisito.
- Medio de transporte habitual: El accidente in itinere se aplica comúnmente cuando el trabajador utiliza su medio de transporte habitual para desplazarse, ya sea caminando, en bicicleta, en automóvil o en transporte público. Algunas legislaciones también pueden incluir otras formas de transporte, como el uso de vehículos proporcionados por el empleador.
Prestaciones e indemnizaciones por el accidente
En el caso de un accidente in itinere que cumple con los requisitos establecidos, el trabajador puede solicitar una indemnización correspondiente. Sin embargo, para respaldar la reclamación del accidente in itinere, es necesario contar con los elementos de prueba adecuados, como denuncia policial, registros de atención médica de emergencia, u otros documentos relevantes según corresponda.
Es importante que el trabajador informe a su empleador sobre el accidente y acuda a la entidad de seguros o mutua laboral correspondiente para recibir el tratamiento médico y el seguimiento de los gastos médicos, ya que estos estarán a cargo de la entidad de seguros o mutua laboral y no de la Seguridad Social. La entidad de seguros o mutua laboral determinará y certificará la gravedad de las lesiones, lo cual afectará directamente el monto de la indemnización.
El reconocimiento del accidente in itinere conlleva varios beneficios en comparación con una baja por accidente no laboral o enfermedad común:
- La baja laboral se compensa desde el primer día, mientras que en otros casos se comienza a recibir compensación a partir del cuarto día de baja.
- La cuantía de la indemnización es superior en comparación con una baja por accidente no laboral, equivalente al 75% de la base de cotización, en lugar del 60% hasta el día 21 y el 75% posteriormente.
- La empresa y la entidad de seguros o mutua laboral asumen una mayor responsabilidad en el proceso.
- En el caso de un accidente de tráfico, que es la causa más común de los accidentes in itinere, si el trabajador lesionado no es responsable del accidente, la indemnización se calculará según el baremo de accidentes de circulación.
Las prestaciones otorgadas serán las mismas que corresponden a cualquier otro accidente laboral, ya que la clasificación del accidente in itinere permitirá al trabajador recibir las prestaciones adecuadas según la gravedad de las lesiones.
Si tiene cualquier otra duda sobre este tipo de accidentes, no dudes en contactar con nuestros especialistas de Bufet Estalella.
